En el mes de octubre, según el informe de Situación Financiera (Situfin), se registró una desaceleración en el gasto acumulado del Estado, que creció 8,8% con relación al 2018, año en el que se había incrementado 10,4% con respecto al 2017.
Esta tasa decreciente obedecería a los menores gastos rígidos del periodo en cuestión. No obstante, dichos gastos siguen estando compuestos en su mayor parte por las remuneraciones a los empleados, que en este año tuvieron una participación de 47,6%, cifra levemente inferior al 48,0% del año anterior.
Por otro lado, el aumento de los gastos sigue siendo superior al de los ingresos totales que variaron 4,1%, lo que estaría explicado por los mayores ingresos tributarios (Gs. 336 mil millones) dados los mayores controles. De esta manera, queda poco para invertir, por lo que el Estado recurre al endeudamiento, mientras que el déficit fiscal acumulado al décimo mes llegó a 1,5%, en el límite de lo establecido en la Ley.
Fuente: Elaboración Mentu con datos de Situfin – MH