Luego de que China, en respuesta a medidas anunciadas por EE.UU., planeara establecer aranceles adicionales del 10% y 5% a algunos productos norteamericanos, que debían entrar en vigor desde el 15 de diciembre de 2019, decidió dar marcha atrás e iniciar la “Fase 1” del acuerdo para solucionar el conflicto comercial que la enfrenta desde hace un año y medio con los Estados Unidos.
Por su parte, EE.UU. reduciría los gravámenes a China, si ésta aumentara sus importaciones de productos agrícolas, manufacturados y energéticos por un valor cercano a USD 20.000 millones en los dos años siguientes, con lo que las exportaciones estadounidenses al mercado chino podrían incluso duplicarse con este acuerdo.
Así, ambas partes retirarían gradualmente algunos aranceles aplicados desde junio de 2018, y también, establecerían un mecanismo de solución de disputas y medidas sobre la propiedad intelectual, y se encuentran planeando las negociaciones correspondientes a la “Fase 2”.
FUENTE: EL PAIS /ELABORACIÓN MENTU CON DATOS DEL WITS.