El Índice de Confianza del Consumidor estadounidense elaborado por el Conference Board, se incrementó levemente en marzo posicionándose en 104,2 puntos, esto es 0,8 puntos por encima de lo registrado en febrero del corriente, aunque se mantiene por debajo del nivel promedio observado en el 2022.
Esta mejora en la confianza del consumidor estadounidense fue impulsada por las expectativas a corto plazo, considerando que el Índice de Situación Actual disminuyó 1,9 puntos en relación al mes pasado, lo cual podría estar influenciado por la reciente tensión bancaria en dicho país.
Por otro lado, si bien el Índice de Expectativas a corto plazo mejoró mensualmente en 3 puntos y se sitúa en 73 puntos, durante 12 de los últimos 13 meses el índice ha estado por debajo de 80 puntos, nivel que indica una percepción de recesión dentro del próximo año.
Los agentes estadounidenses y los mercados permanecen expectantes a la evolución de la crisis bancaria y financiera, así como las decisiones que tome la FED sobre el incremento de sus tasas.


