La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+), liderada por Arabia Saudita anunció recortes en la producción de petróleo a partir de mayo del corriente hasta finales del 2023.
Dicho de recorte, que sería de aproximadamente 1,16 millones de barriles diarios, se debe a las preocupaciones sobre la debilidad de la demanda mundial por el bajo crecimiento esperado.
La decisión de este bloque, que controla cerca del 40% de la oferta mundial del crudo, tuvo un efecto inmediato en los mercados globales, en donde los precios internacionales del mismo se incrementaron en más de 5%. Así, tanto el precio del Petróleo WTI como el del Brent cerraron ayer por encima de los USD 80/ barril.
Se espera que con esta decisión, los precios del petróleo permanezcan elevados en el corto plazo en tanto la demanda se ajuste. Esto genera incertidumbre atendiendo que la inflación no retorna aún a sus niveles habituales. Este incremento podría traducirse en la suba de los precios del combustible localmente considerando la estructura de costos de los emblemas.


