La confianza del consumidor estadounidense volvió a descender en octubre, reflejando una mayor prudencia frente al futuro económico. El indicador elaborado por The Conference Board se ubicó en 94,6 puntos, desde los 95,6 de septiembre, su nivel más bajo en seis meses, manteniéndose por debajo del punto neutral.
La evaluación de las condiciones actuales señala un repunte del Índice de Situación Actual a 129,3 puntos impulsado por una mejor percepción del empleo, el indicador de las expectativas a seis meses cayó a 71,5 puntos, manteniéndose por debajo del umbral que históricamente anticipa una recesión.
El pesimismo se concentró entre los hogares de menores ingresos, afectados por la persistencia de precios altos, mientras que los sectores de mayores ingresos sostuvieron el consumo. Las menciones a la inflación y la política interna dominaron las respuestas de los encuestados.
Analistas señalan que el deterioro de las expectativas podría reforzar la posibilidad de nuevos recortes de tasas por parte de la FED para apuntalar la demanda.


