El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidió mantener sin cambios sus tasas de interés de facilidad de depósito, de las operaciones principales de financiación y de la facilidad marginal de crédito en 2,00%, 2,15% y 2,40%, respectivamente, al tiempo que reafirmó que la inflación convergerá hacia su objetivo del 2% en el mediano plazo.
Según las nuevas proyecciones del Eurosistema, la inflación general promediaría 2,1% en 2025 y descendería gradualmente hasta ubicarse en torno al 2,0% en 2028, mientras que la inflación subyacente seguiría una trayectoria similar, aunque con una desaceleración más lenta en los servicios. Las previsiones de crecimiento económico fueron revisadas al alza, debido principalmente por una mayor fortaleza de la demanda interna. El PIB de la Zona Euro crecería 1,4% en 2025, 1,2% en 2026 y se estabilizaría en torno al 1,4% hacia 2028.
El BCE reiteró que sus decisiones de política monetaria seguirán siendo dependientes de los datos y adoptadas reunión a reunión, sin comprometerse con una senda específica de tasas.


