Tras la culminación del periodo de vacunación contra la aftosa y brucelosis, el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) emitió un comunicado en el que señala que se inmunizaron 13.404.186 bovinos, correspondientes a 134.576 propietarios.
El hato ganadero actual es 1,2% inferior y se redujo en más de 150.000 cabezas en un año, mientras que si se considera su evolución desde el 2020, la merma ha sido superior a las 620.000 cabezas.
Cabe mencionar que en el 2022 el 45% de la población bovina se encontraba en la Región Occidental del país, 9% en San Pedro y 8% en Concepción.
La escasa disponibilidad de bovinos podría traducirse en menor faenamiento, que en marzo se redujo 2,6% (921.000 kilogramos menos), lo que a su vez podría significar menos envíos. A esto se sumaría la creciente demanda de concretarse la apertura de nuevos mercados, que podría presionar los precios al alza.
Por ello, se requieren políticas orientadas a contener la reducción del hato, a fin de mantener en el futuro la capacidad de respuesta a la demanda.


