El Banco Central del Europeo (BCE) decidió incrementar las tasas de referencia en 50 puntos básicos, situándola en 2,50%, su punto más alto desde finales de 2008.
Dicho incremento de las tasas es el cuarto consecutivo y presenta un ritmo desacelerado considerando que las últimas dos subas fueron de 75 puntos básicos.
Desde el Consejo de Gobierno se estima que los tipos de interés seguirán subiendo a un ritmo sostenido hasta que la inflación vuelva a situarse en el rango objetivo de 2%, que según la presidenta del BCE, Christine Lagarde se estima que sea en 2025.
Si bien la inflación interanual en la Zona Euro se ha moderado el último mes en 0,4 puntos porcentuales, ubicándose en 10,1%, habría que seguir expectante a su evolución, puesto que aún no se puede hablar de que se encuentra desacelerándose.
En la decisión del BCE también pudo haber incidido la reciente moderación del ajuste de la tasa de la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED).
