La situación compleja condujo a un aumento de los gastos administrativos y de las previsiones de las financieras, que presentaron variaciones interanuales de 5,4% y 74,8%, respectivamente. Con ello, las utilidades a distribuir de estas entidades cayeron en 17,5% interanual a Gs. 27,6 mil millones, pese al incremento de los ingresos extraordinarios netos.
En cuanto a los márgenes, se verificó un comportamiento dispar: los márgenes financiero y de otros operativos aumentaron 30,3% y 17,8% interanual, respectivamente. Por su parte, los márgenes por servicios, por operaciones de cambio y arbitraje y por valuación registraron caídas de 1,4%, 46% y 95% en términos interanuales. De esta manera el margen operativo cerró con una suba de 21,6% que fue contrarrestada por el incremento de las previsiones.
En conjunto, la situación incidió en los ratios de rentabilidad, que han venido reduciéndose desde el inicio del año. Esto podría señalar que el sector tendría un espacio más limitado para expandir sus actividades durante el resto del año.


