Los indicadores del mercado laboral paraguayo, señalan vulnerabilidades. Así la tasa combinada de subocupación y desocupación se incrementó a 14,8% al cierre de marzo, abarcando a 500.177 personas.
Si bien la tasa es interanualmente 2,6 puntos porcentuales menor y el valor absoluto inferior a la de trimestres vinculados a la época de pandemia, la misma es supera a la registrada en los últimos trimestres previos donde inició la reapertura gradual de la economía.
Este retroceso se debe a las condiciones complejas de coyuntura macroeconómica a nivel mundial y local que han colocado a varias personas en riesgo de vulnerabilidad. Además, el incremento de la inflación habría incidido negativamente en los costos de contratación, por lo que las empresas se vieron obligadas a ajustar a la baja su fuerza laboral.
Con mayores tasas de subocupación y desocupación, el consumo de las personas en dicha situación será limitado, lo que dificultaría la recuperación económica en los próximos meses.


