La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advierte sobre el crecimiento del «fenómeno del trabajador pobre» en América Latina y el Caribe. Según el Informe de Panorama Laboral 2023, la alta inflación redujo el poder adquisitivo de los ingresos laborales y a pesar de que los niveles de empleo en la región son cercanos a la prepandemia, los ingresos reales familiares y laborales siguen bajos.
Además, la fuerza laboral latinoamericana no se ha recuperado por completo. La tasa de participación laboral ha disminuido, mientras que la informalidad laboral se mantiene alta, afectando a alrededor de 48% de los trabajadores de la región. Se destaca el impacto en el mercado laboral juvenil, donde la tasa de informalidad alcanza 58%, y donde, aunque se ha observado un aumento en la ocupación, la inestabilidad laboral persiste.
La OIT señala la necesidad urgente de implementar políticas que impulsen la generación de empleo formal, fortalezcan las instituciones laborales, tengan una perspectiva de género y propicien una mayor empleabilidad en los jóvenes


