El informe sobre Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) revela que el mercado laboral para los jóvenes, entre 15 y 24 años, ha mostrado mejoras en los últimos años y sigue una trayectoria de crecimiento positivo.
A pesar del optimismo, la tasa de desempleo juvenil sigue siendo elevada, situándose en un 13%, lo que representa cerca de 65 millones de jóvenes desempleados. Además, la OIT advierte que los beneficios de la recuperación económica no se han distribuido de manera equitativa. En particular, los jóvenes de algunas regiones y muchas mujeres jóvenes no están experimentando los avances económicos de la misma manera.
Una de las causas del alto desempleo juvenil es la brecha entre las cualificaciones adquiridas por los jóvenes y las habilidades demandadas en el mercado laboral actual. Según la OIT, esta discrepancia ha crecido a medida que, en los países de ingresos medios, el número de jóvenes con educación superior supera la cantidad de empleos disponibles para profesionales altamente cualificados.