El FMI proyecta un crecimiento global de 3,3% para 2025 y 2026, por debajo del promedio histórico de 3,7%. Estas estimaciones reflejan políticas actuales y un contexto de incertidumbre comercial, que se espera sea temporal.
En economías avanzadas, EE.UU. destaca con un crecimiento de 2,7% en 2025, impulsado por mercados laborales sólidos e inversión creciente. En la eurozona, el crecimiento será más lento, alcanzando 1%, afectado por tensiones geopolíticas y menor dinamismo manufacturero.
En economías emergentes, China mantendrá un crecimiento de 4,6%, mientras que India liderará con un sólido 6,5%. En América Latina, el crecimiento se acelerará ligeramente a 2,5%, pese a desaceleraciones en sus mayores economías.
Se espera que los precios de las materias primas energéticas caigan 2,6%, mientras que los alimentos aumenten 2,5% debido al impacto climático. La inflación global continuará disminuyendo hacia las metas de los bancos centrales.


