El Banco Central de Chile proyecta que la economía transandina crecería entre 1,75% y 2,75% en el 2025, una mejora de 0,25 puntos porcentuales con respecto a su estimación de diciembre. Para el 2026 y 2027 se proyecta un crecimiento de entre 1,5% y 2,5%.
El ritmo de crecimiento de la demanda interna aumentaría de 1,3% en 2024 a 2,5% en 2025, mientras que el de la formación bruta de capital fijo pasaría de -1,4% a 3,7% en el corriente. La inflación se desaceleraría desde el 4,5% registrado el año pasado a 3,8% al cierre de corriente, lo que indica una moderación en la presión inflacionaria. Así también, se prevé una mejora del comercio exterior con las exportaciones aumentando al 4,3% y las importaciones, al 5,6%.
Esta mejora de las proyecciones económicas de Chile podría favorecer a los productores locales considerando que este país fue el principal destino de exportación de la carne bovina paraguaya en el 2024 con una participación del 37,3%, mientras que la proteína roja paraguaya representó el 44% de las importaciones chilenas de dicho producto. Esto señala la importancia del vínculo comercial entre ambos países.