A setiembre, los ingresos totales del Estado sumaron Gs.29,8 billones y se incrementaron 10,4% interanual, impulsados por la suba de 17,9% de la recaudación tributaria, que compensó la caída de los otros ingresos.
Los gastos obligados representan el 64,9% de lo presupuestado y crecieron 8% nominalmente en relación al mismo periodo del año pasado, totalizando Gs 28,6 billones, lo que se explica por la suba de las remuneraciones, prestaciones sociales e intereses con variaciones de 9,5%, 11,1%, y 13,2%, respectivamente.
Al deflactar por el IPC, la suba de los ingresos totales habría sido de 0,9% interanual, mientras que los gastos habrían bajado 1,3%. Esto señalaría que en términos reales la ejecución es similar a la del año previo.
Por su parte, las inversiones tuvieron un incremento nominal de 12,6%, ubicándose en Gs.5,3 billones (USD 765,9 millones), destinadas a infraestructura vial, inversiones en salud, educación, vivienda y escenarios deportivos. Así, considerando que la diferencia entre ingresos y gastos no cubrió la inversión realizada, setiembre cerró con un déficit fiscal de 1,5% PIB.


