A pesar de que el saldo de los créditos para cultivos agrícolas ha demostrado un comportamiento razonable a lo largo de los nueve primeros meses del año, el desempeño económico del sector ha sido inferior al registrado en el 2018.
Las importaciones acumuladas de maquinarias agrícolas se redujeron en 35,5% en términos interanuales, lo que indica una menor inversión por parte de los productores. Por el lado de financiación, se observa una mayor concesión de préstamos al segmento, que a setiembre aumentó 8,8% interanualmente, lo que estaría respondiendo a la necesidad de cubrir otros compromisos dado el dificultoso momento sectorial.
En la última revisión del PIB se proyectó para el 2019 un crecimiento de -6,2% para la agricultura, debido a factores climáticos e internacionales (precios de commodities) que afectaron su producción y sus exportaciones.
Fuente: Elaboración Mentu con datos del BCP.