En el presente año, Paraguay ocupa la posición 69/82 dentro del ranking mundial de movilidad social elaborado por el Foro Económico Mundial, con una calificación general de 47/100.
La movilidad social hace referencia a las oportunidades con que cuentan los habitantes de un país de progresar dentro de una escala socioeconómica. En el caso paraguayo, gran parte de los ciudadanos enfrentan serias dificultades en el acceso a una educación de calidad, a una cobertura del seguro social y un salario justo, que permitan su movilidad social.
Si bien, el país cuenta con una alta calificación en el acceso a la salud y las oportunidades laborales, esto no refleja necesariamente una buena calidad en el servicio o la obtención de un trabajo decente.
Las consecuencias de la baja movilidad social se traducen en un estancamiento o, en algunos casos, empeoramiento del nivel de vida de la población, lo cual termina repercutiendo en forma negativa sobre los resultados potenciales de crecimiento y desarrollo socioeconómico del país.