Según el IPCA (Índice Nacional de Precios al Consumo Amplio), la inflación oficial de Brasil fue de 0,44% en septiembre, tras haber registrado una leve deflación del 0,02% en agosto. Además, la inflación acumulada en los últimos 12 meses se aceleró, pasando de 4,24% al 4,42%, alejándose de la meta del 3%.
En la comparativa interanual, la inflación en Brasil se ha situado en 3,31%. En septiembre, el índice se vio influenciado principalmente por el aumento de 1,80% en el grupo de vivienda y de 0,50% en el de alimentos y bebidas.
En el grupo de vivienda, la electricidad residencial experimentó un aumento del 5,36% en septiembre, lo que es atribuido a la implementación de la alerta roja de tarifa nivel 1, que añade 4,463 reales por cada 100 kWh consumidos. Además, el gas envasado también contribuyó al aumento en este grupo, con un incremento del 2,40%.
Esta evolución de los precios en el vecino país podría seguir retrasando el ajuste de su tasa de referencia que hoy se sitúa en 10,75%.