En medio de la incertidumbre generada por los anuncios de Lula da Silva sobre medidas fiscales que adoptaría, la cotización del dólar estadounidense en Brasil superó los 6 reales por dólar, acumulando una depreciación de 4% en la semana y de 25% en lo que va del año.
El paquete de medidas anunciadas incluye una reforma del Impuesto a la Renta, que ampliará la exención para quienes ganan hasta 5.000 reales al mes, cumpliendo una promesa de campaña del Presidente. El gobierno brasileño espera que dicha exención sea compensada con la suba de los impuestos a las rentas mayores a 50.000 reales. Ambas medidas regirán a partir del 2026.
Así también, se anunció medidas de ajuste del gasto como el establecimiento de una edad mínima para el ingreso de militares a la reserva y un mayor control de los beneficiarios sociales del estado brasileño.
La mayor depreciación del real afecta al comercio exterior con Paraguay, dado que Brasil es el destino del 25% de las exportaciones registradas y es fundamental para el comercio fronterizo.