La Reserva Federal (FED) mantuvo sin cambios su tasa de interés de referencia entre 4,25% y 4,5%, pese a la presión creciente desde la Casa Blanca. La decisión consideró que la economía estadounidense se mantiene sólida y con bajo desempleo, mientras que la inflación permanece por encima del objetivo del 2%.
El Presidente de la FED, Jerome Powell, recalcó que el banco central necesita más claridad sobre el impacto de los aranceles antes de hacer ajustes y que actuará «según sea necesario», incluso de forma enérgica si las condiciones lo exigen.
El Presidente de EE. UU., Donald Trump, renovó sus críticas contra el titular de la FED, acusándolo de no querer recortar las tasas, lo que considera sería como “combustible para aviones” para la economía. Consultado sobre las críticas, Powell no realizó comentarios y reiteró su intención de completar su mandato, que culminará en aproximadamente un año.
La decisión de la FED podría conducir a que los bancos centrales de países emergentes mantengan sus tasas inalteradas.