Las exportaciones totalizaron USD 5.149,5 millones en los primeros cuatro meses del año, registrando así una caída interanual de 6,4%, como resultado de menores ventas al exterior de energía eléctrica, granos y harinas de soja. Los principales destinos fueron Brasil, Chile, Argentina, Rusia y Taiwán, destacándose envíos de carne, aceite de soja y aluminios.
Las importaciones alcanzaron USD 5.461,2 millones, con un incremento interanual de 3,2%, explicado por mayores compras de maquinaria, equipos y productos primarios, mientras que el valor de la importación de combustibles disminuyó. Los principales orígenes de los productos importados fueron China, Brasil y EE.UU.
Así, la balanza comercial arrojó un resultado deficitario de USD 311,7 millones, revirtiendo el superávit que se había obtenido en el mismo periodo del año pasado.
La situación deficitaria del saldo comercial refleja un contexto menos favorable para las exportaciones tradicionales y una demanda interna que impulsa a las importaciones con precios aun elevados, resaltando la necesidad de diversificar la oferta de bienes transables.